Somos clientes-amigos más que habituales. Nos encanta la barra, ese rincón nada más entrar a la derecha. El equipo es de primera división así como la calidad de sus productos elaborados y de temporada. La ensaladilla rusa es su sello, las croquetas de bacalao y las croquetas de jamón crujiente son de 10, el steak tartar fantástico.
Pero no nos vamos sin tomar de postre la torrija, no es cualquier torrija no se puede explicar hay que probarla.
Pero sin ninguna duda quién nos hace estar como en casa (no sé lo digáis a mi madre) es Toni. Antonio hace de la cena un espectáculo, siempre atento nunca te falta de nada, opinión de cine, lugares de vacaciones etcétera. Gracias a todo el equipo y a Antonio en particular.
PD. La cocina o la sala de máquinas como me gusta llamarla a mi es un lugar mágico, gracias también a los magos.